La llegada de la Cuarta Revolución Industrial es una realidad innegable, al igual que es innegable que todos los sectores sociales y económicos se verán afectados en mayor o menor grado por este cambio, independientemente de su naturaleza.  La cuestión por tanto ya no es cuándo, sino cómo van a redefinirse esos sectores y de que modo sus agentes deben comenzar, si es que aún no lo han hecho, su transformación digital.

 Uno de los ámbitos que más tempranamente ha asumido la necesidad de reinventarse ha sido el educativo. Las pizarras digitales, los elementos multimedia y los software creativos hace ya tiempo que conviven en las aulas con libros, mapas y cuadernos. Pero aún queda mucho camino que recorrer. De hecho, se espera que la llamada EdTech, la industria de la tecnología educativa, alcance los 252.000 millones de dólares en 2020, creciendo a un ritmo anual del 17%.

Entre las tendencias más significativas en EdTech, la realidad aumentada ocupa probablemente la posición más destacadas gracias a las innumerables ventajas didácticas que aporta esta herramienta inmmersiva . En los próximos tres años se espera que más de mil millones de personas en todo el mundo sean usuarios activos de AR, lo que abre un abanico de oportunidades para docentes e instituciones educativas, y por supuesto también para las empresas.

En este artículo, exploraremos en detalle esta tendencia de EdTech y veremos algunos casos de éxito aplicados ya en aulas de todos el mundo. 

Uso de la Realidad Aumentada en Educación: retos y oportunidades

La realidad aumentada en el aula puede servir para varios propósitos, pero el más claro es ayudar a los estudiantes a adquirir, procesar y recordar fácilmente la información aprendida en el aula. Además, por supuesto, de  hacer que el aprendizaje sea más atractivo y divertido.

Sin embargo, no debemos concebir su uso como algo limitado a un único grupo concreto de edad o con un nivel de educación. La realidad aumentada, como instrumento formativo, puede usarse desde la educación preescolar hasta la universidad e incluso en el trabajo.

Beneficios de la realidad aumentada en educación

•  Los materiales de aprendizaje están accesibles en cualquier momento y en cualquier lugar: la realidad aumentada tiene el potencial de reemplazar los libros de texto en papel, los modelos físicos, los carteles, etc, ofreciendo materiales de aprendizaje portátiles y menos costosos.
•  No requiere un gran desembolso en equipos. A diferencia de la realidad virtual, la aumentada no necesita un hardware costoso, especialmente si tenemos en cuenta que el 73% de los adolescentes españoles posee un teléfono inteligente con el que poder hacer uso de aplicaciones AR.
•  El aprendizaje interactivo y gamificado tiene un significativo impacto positivo en los estudiantes, a los que mantiene más concentrados e interesados durante la lección, haciendo además que el proceso sea más divertido e interesante para ellos.
•  Las lecciones interactivas basadas en realidad aumentada aumentan las capacidades de colaboración entre los estudiantes, mejorando las habilidades de trabajo en equipo.
•  Se genera un proceso de aprendizaje más rápido y efectivo gracias a la visualización y la inmersión total en la materia. ¿No dicen que una imagen vale más que mil palabras?, entonces, qué mejor que ver la teoría en acción en lugar de tener que leerla.
•  Además de la educación reglada, la formación laboral también puede beneficiarse enormemente del uso de la realidad aumentada. Por ejemplo, la reproducción precisa de las condiciones de un espacio de trabajo puede ayudar a dominar las habilidades prácticas requeridas para unas determinadas funciones profesionales.

 

Realidad aumentada en el aula 

Las apps de realidad aumentada se han convertido, en un tiempo record, en un recurso didáctico muy valorado por el profesor a la hora de explicar una materia, proporcionar una representación visual o incentivar a los estudiantes para que pongan a prueba sus conocimientos en la práctica.

Junto a los juegos y al marketing, la educación es probablemente el sector con más contenidos desarrollados para cubrir sus necesidades.  Podemos encontrar una aplicación AR para casi cualquier tema, incluida la química, la geometría, la zoología, la gramática e incluso la programación.

Aprendizaje a distancia 

Mediante el uso de la realidad aumentada, los estudiantes pueden aprender también fuera del aula. De hecho, el aprendizaje on line o a distancia es notablemente más fácil y eficiente con materiales educativos asistidos por AR.

Por ejemplo, Modly, una aplicación de aprendizaje de idiomas, ha integrado recientemente un profesor virtual basado en AR para ayudar a los usuarios a practicar sus habilidades como si estuvieran en un entorno de la vida real. 

 

 ¿Cómo implementar la realidad aumentada en un centro educativo?

Con gigantes como Apple,  Google o Amazon impulsando las tecnologías de realidad aumentada, estamos en el momento idónea para comenzar a implementar esta herramienta. Las posibilidades de plataformas AR para desarrolladores, como ARCore, ARKit o AR View, junto con un hardware potente, como el iPhoneX o el Samsung Galaxy S9, hacen posible que cada vez más empresas creen soluciones EdTech.

En Isostopy desarrollamos tanto soluciones ad hoc, de acuerdo a los objetivos específicos del cliente, como proyectos educativos propios. En este sentido, en los próximos meses verá la luz “Daira”, una AR app  que permitirá a los estudiantes conocer de manera inmersiva materias claves de la historia o del arte. Con ella los alumnos podrán desde interactuar con Velázquez a participar en la construcción de una catedral medieval o revivir la Guerra de la Independencia.

Como estamos viendo, la realidad aumentada en la educación tiene un potencial enorme, que apenas está comenzando a dar los primeros pasos en un camino cuyo final está lejos si quiera de poder atisbarse. Con la adopción actual de tecnologías móviles y los recientes avances en hardware, las barreras en la implementación de la realidad aumentada están desapareciendo convirtiendo esta tecnología en una de las más accesibles y utilizadas. El momento actual es clave para dar en esta dirección y posicionarse como centro innovador en su implementación.